Y nos llaman amantes de los caballos...

Hoy, he leído un gran artículo que el veterinario americano de renombre internacional Robert Miller escribió en 2006 (and they call us horse lovers) y quería compartirlo con vosotros, porque me ha recordado la infinidad de veces que me he hecho la misma afirmación a través de la observación de propietarios, entrenadores, jinetes... A través de la lectura de artículos en determinadas revistas...

La mayoría de caballos en nuestro país, sufren abusos de uno u otro tipo que terminan causándoles desequilibrios físicos y/o mentales muchos de los cuales terminan con la vida del animal (ya sea éste, un fin real o virtual, entendiendo este último como la aniquilación de su personalidad, vitalidad...).

Podemos poner algunos ejemplos si queréis...

• De cuántos caballos tenéis constancia que estén fuera de su peso óptimo (ya tengan problemas de sobrepeso o al contrario)... Yo he visto tantos que se me hace un nudo en la garganta...

• De cuántos caballos tenéis constancia que estén sometidos a una dieta totalmente artificial? (mucho pienso, poco forraje y nada de hierba fresca)

• Cuántos caballos conocéis que estén encerrados en un box, solos y con una cama destructiva (camas húmedas por las heces y la orina que se cambian como máximo una vez a la semana).

• A cuántos caballos se les aplican torturadores mecánicos (palancas, puentes, cadenas, hackmoores mecánicos, serretones...) o generadores de pánico (golpes, palizas, "fustazos", latigazos...) para "domarlos" o "controlarlos".

• Cuántos conocéis que hayan sufrido algún tipo de aberración sexual (violaciones, castraciones directas o con cañas).

• Cuántos conocéis que en nombre del deporte, de la competición o de los espectáculos hayan sufrido entrenamientos demasiado tempranos (por debajo de los 4 años), alteraciones físicas (infiltraciones, neurectomías, ablaciones linguales, ablaciones caudales, roturas de la P3, herrajes espaciales para conseguir un tipo de movimiento concreto...), herrajes demasiado tempranos (antes de los 5 años)...

La lista podría seguir resultando casi interminable... Y nos llaman amantes de los caballos... 

Desde mi punto de vista hay gente que debería tener prohibido ser el dueño de un animal tan sensible y noble como lo es el caballo... Como ya he dicho otras veces, está en las manos de los profesionales y los propietarios concienciados cambiar la situación actual en la que viven la mayoría de caballos de nuestra tierra.

Gracias por leer. Albert